NUESTRA HISTORIA
La Familia Espadas
Emilio Espadas pertenece a la tercera generación de alfareros en Uayma Yucatán. Siguiendo la tradición de su tía Juanita Dzul, quien fuera su maestra y una mujer ceramista reconocida en su comunidad por su talento y su determinación a la libertad. Desde hace más de 33 años Don Emilio y su familia trabajan en su casa, en el horno de piedra construido con sus manos, dejando que barro le hable y en comunión con los ciclos naturales de la exuberante selva yucateca.
La manera tradicional antigua maya de hacer cerámica, es ofrendando el trabajo y el esfuerzo a los elementos naturales. Cada integrante de la familia es parte del trabajo, eligen el tipo de tierra ideal para cada pieza y la mezclan con otros minerales haciendo la alquimia de la belleza y la utilidad, tan importantes en su forma de vida. Moldean las piezas con sumo cuidado y destreza, para después presentarlas al fuego en una ceremonia que se hace con Anona y ajo para ahuyentar los malos vientos. También pregunta al viento hacia donde va a soplar y así saben cual es el mejor lugar para poner sus piezas a enfriar, una vez que se sacan del horno, aún encendidas de tierra viva, mientras los niños observan con atención como lo hacen los grandes.
Don Emilio es el último ceramista de la zona que trabaja la cerámica maya a la usanza tradicional antigua, el sueño de su familia desde los tiempos de su tía Juanita es el transmitir este conocimiento a las comunidades de la región y abrir una escuela de alfarería para los niños de Uayma logrando posicionarlo como el centro ceramista más importante de la península de Yucatán.